Guía para hacer una evaluación de desempeño efectiva

Existen procesos que son propios del área de Recursos Humanos. Uno de las más importantes es el de realizar una medición del trabajo de sus empleados, que incluye su rendimiento y habilidades.

Esta es la definición más sencilla de evaluación de desempeño. Llevar un control de forma periódica de cómo avanza cada empleado, de sus talentos y también sus puntos débiles, resulta crucial para poder hacer un análisis global del crecimiento de la compañía, y poder tomar cartas en el asunto para saber qué pasos dar, para seguir creciendo y mejorando.

  • ¿Cómo realizar una evaluación de desempeño?

Es un proceso que consta de varias instancias y donde están involucrados múltiples actores. Empecemos por lo más básico.

  • Diseñar objetivos

A la hora de evaluar a un empleado, si no tienes marcados los objetivos que este debe cumplir, no tendrás un parámetro desde donde basarte para saber si ha avanzado o no.

Un objetivo, por ejemplo, puede ser el de conseguir más clientes, alcanzar más ventas. Las expectativas deben ser realistas, los objetivos no deben ser imposibles, de lo contrario puede frustrar a un empleado que no los consigue. 

También deben ser específicos, hablar de cifras exactas, un número determinado de ventas o de clientes. Los objetivos deben ser claros, y debe existir un diálogo con el empleado para que este sepa exactamente cómo se lo va a evaluar, o qué se espera de su trabajo. 

Es importante dejar en claro si con estos objetivos cumplidos habrá un aumento salarial o no, de esta forma no se generan falsas expectativas en caso de que no lo haya. La retribución económica puede ser un excelente incentivo para que los empleados cumplan con sus metas. 

  • Selección de los indicadores a evaluar

Los indicadores son los que van a arrojar los resultados en base a métricas y porcentajes, y por eso es importante definirlos, ya que no es lo mismo analizar, por ejemplo, la cantidad de horas extras realizadas, que medir el tiempo promedio de finalización de tareas.

  • Hard skills: son las que se relacionan directamente con los conocimientos técnicos y teóricos sobre un área específica. Se consiguen a partir del estudio de una carrera y a partir de los años de experiencia en un rubro. Esta formación académica no todas las personas la tienen y por eso es fundamental evaluarla.
  • Soft skills: son aquellas habilidades y comportamientos que se ponen de manifiesto en el trabajo cotidiano, y que cualquier trabajador puede contar con ellas. Algunas personas tendrán más facilidad con el trabajo en equipo, mientras que otros tendrán su fuerte en la puntualidad, o en el trabajo bajo presión, o el grado de autonomía.
  • KPIs: son los objetivos específicos que definimos con anterioridad, y que obviamente debemos incluir dentro de nuestros indicadores, ya que aportarán métricas importantes a la hora de evaluar el resultado final.
  • Valores corporativos: es esencial saber si los valores de nuestros trabajadores van acorde a las ideas que se manejan dentro de la organización. También aquí se evaluarán aspectos como el compromiso que demuestra el empleado, su manejo del respeto para con sus compañeros, o su ética empresarial. 
  • Selección del tipo de evaluación de desempeño

Existen diferentes maneras de evaluar. Se elaboran encuestas que, por lo general, suelen ser personalizadas según a quién se va a evaluar o al puesto laboral al que pertenece. Por ejemplo, no serviría hacer una evaluación de 90º, si a quien se está evaluando es la Supervisor a cargo justamente. Aquí te mostramos los diferentes tipos de evaluación que existen:

  • Evaluación 90º: las realiza el Jefe, quien será el encargado de evaluar a su personal.
  • Evaluación 180º: es la evaluación que hacen los propios compañeros entre sí.
  • Evaluación 270 º: son los empleados los que evaluarán a su Supervisor a cargo.
  • Evaluación 360 º: se suman todos los tipos de evaluación anteriormente nombrados, para tener una perspectiva completa de un determinado perfil.
  • Autoevaluación: es la posibilidad de que el empleado se evalúe a sí mismo. Es una metodología muy extendida en bolsas de trabajo, en una instancia en la que todavía no has conseguido un puesto laboral, pero quieres que te conozcan y que conozcas tus fortalezas y puntos a trabajar.
  • Evaluación por objeticos: cuando la evaluación se centra únicamente en los objetivos planteados anteriormente.
  • Evaluación por competencias: se limita el cuestionario directamente a las habilidades que se requieren específicamente para determinado puesto laboral. Aquí el empleado deberá demostrar sus habilidades y conocimientos.
  • Evaluación de la satisfacción del empleado: aquí lo único que se intenta medir es el nivel de satisfacción que el trabajador siente para con su entorno y puesto laboral, considerándose este un aspecto fundamental para que desarrolle bien su tarea.
  • Evaluación ante incidentes extremos: las situaciones bajo presión pueden generar un accionar de parte del personal, que puede arrojar tanto resultados positivos como negativos. Hay personas que trabajan mejor bajo situaciones de estrés, y otras cuyo rendimiento decae.
  • Evaluación de costes: es una relación directa entre la inversión que se hace por un empleado, y las ganancias que este le genera a la compañía.
  • Reunión one to one: éstas son reuniones sistemáticas en donde empleado y supervisor, charlan sobre los aspectos a mejorar o sobre problemáticas que necesitan solución, o aspectos con los cuales alguna de las partes puede estar descontento.

Claro que se pueden combinar más de una metodología de evaluación de desempeño.

  • Ventajas de una evaluación de desempeño

Una evaluación de desempeño ayuda considerablemente a mejorar el rendimiento de una empresa. Esto se logra a través de varios beneficios que promueve la evaluación.

  • Feedbacks constantes: ayuda a la comunicación y el diálogo para mejorar y solucionar problemas. Esto crea un clima laboral más cuidado.
  • Evita los sesgos: se evita caer en falsas expectativas, reflejando el rendimiento real de cada uno en datos empíricos. La idea que tenemos de otros muchas veces puede ser sesgada por nuestras impresiones.
  • Genera aprendizaje constante: todo el equipo tiene la oportunidad de mejorar constantemente y de superarse gracias a una evaluación de desempeño.

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